Un proyecto nace con la primera idea y, después de pasar por el diseño y la arquitectura, y su construcción, finaliza cuando se desaparecen los últimos vestigios de su existencia física. Y la metodología BIM (siglas en inglés de Modelado de Información para la Construcción) desempeña un papel fundamental a lo largo de todas estas etapas de su vida. Veamos en este primer artículo qué relación tiene dicha metodología con las fases iniciales del proyecto:

Estudios preliminares: En esta etapa se realiza un análisis profundo del emplazamiento del proyecto, para la comprensión de factores como los aspectos sociológicos, topográficos y ambientales que lo rodean. Se recopila información exhaustiva a este respecto para obtener una visión general que orientará la creación de los primeros esquemas.

Respecto al trabajo de esta etapa temprana en BIM, el modelo comienza a desarrollarse. Incluye sus datos de identificación, modelado del terreno basado en información topográfica, cumplimiento de regulaciones locales y posibles estudios de flujo de tráfico vehicular y peatonal en el entorno. Estos datos ayudan a realizar la adaptación de los bocetos iniciales.

-Fase de anteproyecto: a través de reuniones entre diseñadores, arquitectos y promotores, se presentan las primeras propuestas de diseño y arquitectura.

Y en cuanto a su traslado a metodología BIM, en esta fase el modelo abarca una serie de volumetrías conceptuales, estudios de exposición solar, análisis de la influencia del viento, infografías, esquemas de áreas brutas, recorridos, etc. Todos estos elementos son esenciales para calcular los primeros parámetros estimados y continuar con el desarrollo en la fase siguiente.

Proyecto básico: durante esta fase, se desarrolla la solución de diseño y arquitectura seleccionada por el equipo de proyecto.

En consecuencia, los modeladores BIM de las disciplinas de arquitectura, estructura e instalaciones entran en acción. Se definen los elementos de referencia del modelo, como niveles, coordenadas y la estructura de los archivos vinculados entre sí. El modelo arquitectónico se establece con categorías como muros, suelos, techos y huecos, pero con la información más básica. La estructura se dimensiona adecuadamente, lo que permite una coordinación eficiente con las demás disciplinas. En cuanto a las instalaciones, se ubican volumétricamente los equipos, especialmente en los locales técnicos. Y todo bajo el liderazgo y la coordinación del Director BIM.

Hasta aquí las fases iniciales del ciclo de vida de un proyecto BIM. Volveremos sobre la cuestión para dar cuenta de las siguientes etapas.

Por David González Molina, gestor BIM en el Dpto. de Arquitectura de Amusement Logic