Published On: 10.05.2023|Categories: Noticias generales|

Deep Green, compañía británica, ofrece a sus clientes servicios de almacenamiento de datos en la nube, cálculo para Inteligencia Artificial y aprendizaje automático y renderización de vídeo. Sin embargo, la actividad de la empresa no se limita a dichos servicios, sino que es pionera en la aplicación de su tecnología a un campo completamente distinto y sorprendente: la climatización del agua de las piscinas. O, como lo expresan en la compañía, una tecnología que «calienta gratuitamente las piscinas públicas». Según explican en su nota de prensa, el centro de ocio Exmouth del condado de Devon, en el suroeste de Inglaterra, es el primer complejo acuático que se beneficia del sistema.

Según los datos que proporciona la empresa, los centros de datos representan el 3% de las emisiones de gases de efecto invernadero en el mundo. De hecho, según declara a la BBC el director de Deep Green, Mark Bjornsgaard, «gran parte del dinero que cuesta gestionar un centro de datos se invierte en eliminar el calor». Efectivamente, los grandes centros de cálculo necesitan miles de millones de litros de agua y millones de euros para su refrigeración. Algunos se construyen bajo el agua, en cuevas o en zonas frías del planeta. Y en algunas ciudades de Dinamarca y Suecia, el calor que generan esos centros de datos se emplea para el suministro de miles de hogares. Ahora, Deep Green aplica el mismo principio a la climatización del agua de las piscinas públicas.

La empresa británica ha convertido el hardware de sus equipos en lo que llaman una «caldera digital». O, lo que es lo mismo, «un centro de datos en la nube que transforma eficazmente el calor de sus servidores en agua caliente útil», en este caso para la climatización del agua de las piscinas. Para ello, sumergen el centro de datos en un aceite mineral, que «captura el 90% del calor que produce», y luego lo bombean a un intercambiador de calor para calentar el agua de la piscina. Deep Green suministra, instala y mantiene sus calderas digitales de forma gratuita y, además, paga por la energía que consumen. Al fin y al cabo, su negocio está en la comercialización de la potencia de cálculo de sus unidades. A cambio, solo exige de los centros acuáticos un espacio para instalarlas y conexión suficiente a la red y a Internet.

En el caso del centro de ocio de Exmouth, el calor «donado» por la unidad de Deep Green «reducirá las necesidades de gas de la piscina en un 62%, lo que le permitirá ahorrar más de €22.000 al año y recortar sus emisiones de carbono en 25,8 toneladas». Sean Day, director del centro de ocio de Devon, aseguró en declaraciones a la BBC que su colaboración con Deep Green «ha ayudado a reducir unos costes que han sido astronómicos en los últimos 12 meses».

Fuentes: Deep Green, BBC. Imágenes: Deep Green.

TAMBIÉN PODRÍA INTERESARLE

Suscripción


Si quiero suscribirme


He leído y acepto las condiciones y términos de uso