Situado en la región de Kumamoto, Japón, Aso Farm Land ofrece una experiencia turística singular. El Monte Aso, uno de los volcanes activos más grandes del mundo, domina el impresionante entorno natural en el que se encuentra este complejo turístico. Una de sus atracciones más características y singulares son los alojamientos con forma de cúpula, inmersos en una tematización de fantasía que juega con las rocas volcánicas del lugar.

El diseño y la arquitectura de estas estructuras semiesféricas, más allá de la experiencia única del alojamiento, les confiere un atractivo indiscutible. Sus formas curvas reducen al mínimo la entrada de ruido exterior y les confiere una gran resistencia y solidez ante condiciones adversas como fuertes vientos o movimientos sísmicos. De hecho, durante el terremoto de Kumamoto de 2016, demostraron su excepcional seguridad al permanecer intactas y servir de refugio temporal a numerosas personas.

El poliestireno expandido o EPS con el que se han fabricado las cúpulas —un material ligero, resistente y duradero, además de térmica y sonoramente aislante—, permite una construcción rápida, eficiente y de bajo impacto ambiental. Su producción consume menos energía y facilita el transporte; su montaje es notablemente rápido gracias a un diseño modular con piezas prefabricadas que se ensamblan mediante un sistema de encaje, sin necesidad de maquinaria pesada.

En el interior, los espacios con camas confortables, zonas de descanso, baño privado y ventanas que garantizan una generosa entrada de luz natural, hacen la experiencia turística del alojamiento realmente cómoda.

Imágenes: Aso Farm Land.

Por Tianshu Liu, arquitecta sénior en el Dpto. de Arquitectura de Amusement Logic