La realidad virtual se ha convertido en una herramienta indispensable en arquitectura, diseño y construcción. Su aplicación ya no se limita únicamente al boceto y el maquetado en tres dimensiones del diseño, sino que permite simular un espacio inexistente y vivirlo en todos sus aspectos, ya sean estéticos o funcionales.
Una de las tecnologías conocidas a este respecto es IrisVR (de IrisVR Inc.). Con ella se crean prototipos interactivos de espacios y edificios mediante tecnología BIM (siglas en inglés para Modelado de la Información para la Construcción). Los clientes o usuarios finales experimentan los diseños propuestos mientras los exploran, incluso en etapas tempranas del proyecto. Esta inmersión temprana en la realidad virtual de un edificio, además de adelantar las preferencias del cliente o el usuario, revela a menudo necesidades y/o obstáculos que de otro modo serían difíciles de detectar.
El estudio de arquitectura Zaha Hadid Architects ha experimentado a menudo con la realidad virtual. Por ejemplo, en la galería de arte Serpentine de Londres, Reino Unido, la firma ofreció Serpentine Pavilion VR Experience, una experiencia espacial virtual que trascendió las limitaciones físicas y proporcionó a los visitantes una visión más completa de su arquitectura. Del mismo modo, en la presentación del Hotel Morpheus de Macao, China, el estudio de arquitectura demostró cómo un edificio aún en proceso de construcción podía experimentarse y apreciarse en su totalidad a través de la realidad virtual.
Por lo tanto, la realidad virtual ha ampliado las posibilidades creativas y ha mejorado significativamente la forma en que interactuamos con los espacios en arquitectura.
Por Juan Guardiola Cutillas, arquitecto sénior en el Dpto. de Arquitectura de Amusement Logic