El Observatorio de la Movilidad Metropolitana (OMM) en España, una iniciativa para fomentar el uso del transporte público entre los ciudadanos, analizó en uno de sus informes la composición de los desplazamientos diarios en las ciudades. En él destacó el predominio del uso del automóvil o la motocicleta (que representan alrededor del 60% de los desplazamientos), al que le sigue el uso de la bicicleta y el caminar (en torno al 20%) y, en último lugar, el transporte público (que es responsable de alrededor del 15% de los desplazamientos). Por otro lado, cabe señalar que el 50% de los desplazamientos en coche, según OMM, se realizan para recorrer menos de 3km. Sin embargo, los estudiantes universitarios prefieren la actividad física activa y, por tanto, se desplazan caminando o van en bicicleta, o mediante el transporte público.
Para fomentar el transporte público y sostenible, los planificadores y las autoridades competentes deben tomar medidas y adaptar las ciudades a las nuevas tendencias en movilidad. En España por ejemplo, la Dirección General de Tráfico se propone crear un carné B1 que permita a los menores a partir de 16 años conducir vehículos eléctricos de hasta 90 km/h (como ya ocurre en Francia). Al mismo tiempo, los coches diésel y de gasolina dejarán de venderse a partir del 1 de enero de 2035.
Entre las medidas que se implementan para el fomento del transporte público y sostenible están las de facilitar la especialización peatonal permanente de calles antes utilizadas por automóviles o la eliminación de vehículos de los centros de las ciudades durante los fines de semana. Otra medida para desincentivar el uso del coche consiste en la reducción de plazas de aparcamiento en esos mismos centros, al tiempo que se proporcionan otras gratuitas y de calidad en las afueras, con una buena comunicación bien a través de bicicleta o de transporte público. La reducción de la velocidad a 30 km/h y la creación de redes mayores de carril bici contribuyen a que los vehículos utilicen cada vez menos potencia, además de mejorar la seguridad de los ciclistas y, por tanto, favorecer que más ciudadanos se decidan por la bicicleta como medio de transporte.
Por Raúl Soriano, modelador sénior en el Dpto. de Arquitectura de Amusement Logic
