Cuando pensamos en los parques acuáticos, imaginamos toboganes vertiginosos, piscinas de olas, suaves ríos lentos, horas plácidas tendidos en hamacas al sol, diversión… Pero detrás de las experiencias y de la diversión que proporcionan las atracciones de un parque acuático hay mucho más: hay creatividad, ingeniería, estrategia económica y otras cosas, una combinación que crea un universo único de ocio y rentabilidad. Pasad y ved:

Escenarios que cuentan historias

En los parques acuáticos modernos cada espacio se convierte en un escenario temático que nos transporta a lugares insospechados; a una selva tropical con exuberante vegetación, a las faldas de un rugiente volcán, a una isla exótica en medio del océano… Rocas artificiales, árboles y palmeras, praderas de césped, grutas y cuevas, cascadas, pero también sonidos, luces, efectos especiales, hacen de los espacios de un parque acuático lugares que nos envuelven en una experiencia inmersiva.

Seguridad: la prioridad silenciosa

La ingeniería que hay detrás de cada atracción quizá sea la parte que pasa más desapercibida y, sin embargo, de una importancia crítica. Y es que el diseño de toboganes, de piscinas, de ríos lentos, de las atracciones de un parque acuático en general, pero también de los circuitos, de las superficies, de la distribución, se realiza de acuerdo con cálculos milimétricos —incluso milmilimétricos—: la altura e inclinación de los toboganes, la velocidad a la que descienden los usuarios, la profundidad de las piscinas, la situación de las bombas y los agitadores… todo se equilibra para asegurar la mayor emoción sin riesgos.

De esa seguridad que no se ve pero que está, los socorristas representan la parte visible e igual de imprescindible. Convenientemente certificados, los socorristas cumplen con un programa de formación continua en técnicas de rescate y primeros auxilios.

Experiencias para todos

Y si volvemos a la cuestión de las múltiples experiencias que atraen al público familiar a un parque acuático, la clave está en el equilibrio de su oferta, y también de su distribución: cada uno de los integrantes de ese público familiar, desde los más pequeños y los jovenzuelos hasta los más provectos, deben encontrar su espacio particular de diversión, de relajación o de entretenimiento.

Dicho de otra forma, los más jóvenes y aventureros tendrán los toboganes —o atracciones tan desafiantes como los canyonings—; ríos lentos y jacuzzis harán las delicias de los adultos, o de quienes simplemente buscan relajarse; y los niños tendrán las zonas infantiles con todos los detalles para su divertimento. En definitiva, un parque acuático bien diseñado proporciona un itinerario de satisfacción a cada tipo de visitante.

Sostenibilidad en expansión

Pero la satisfacción, la diversión, el sosiego o el solaz pueden también ser «verdes» en un sentido moderno. Para que así sea, un parque acuático cuenta con el reciclaje y la reutilización de agua, el diseño para la eficiencia energética y la energía solar, pero también los materiales reciclados en mobiliarios y tematización, y un paisajismo adaptado al clima que reduzca el consumo hídrico. Y es que la sostenibilidad ya no es un deseo o una característica meramente adicional, sino que forma parte integrante de la identidad de los nuevos parques acuáticos.

Rentabilidad: el secreto último

Finalmente, un parque acuático nace con una importante inversión y es, por tanto, también, un negocio. Sus ingresos se dividen típicamente entre los que proceden de la venta de entradas —entre el 50% y el 60%—, los del capítulo de restauración y ventas al por menor —en torno al 25% o 30%—, y la parte de los patrocinios y los eventos —que aportan entre el 5% y el 15% restante.

El éxito económico de un parque acuático depende en definitiva de tres factores: el control estricto de costes, unos precios dinámicos ajustados a la demanda, y la reinversión constante en nuevas atracciones y/o tematizaciones que mantengan vivo cada temporada el interés de los visitantes y turistas.

Curiosidades acuáticas

¿Sabías que un parque de grandes dimensiones puede recibir más de 500.000 visitantes por temporada? ¿O que la temperatura ideal del agua para el confort de los bañistas es de entre 26 y 28 °C? ¿Sabéis que el parque más visitado del mundo, con 2,7 millones de visitas anuales, es el Chimelong Water Park que se encuentra en China? Pues sí, estas son algunas de las curiosidades que nos ofrecen los parques acuáticos. Estad atentos a nuestras publicaciones —y hasta podéis suscribiros a nuestro boletín— para conocer más aspectos interesantes sobre los parques acuáticos.

Imágenes: Dreamland Aquapark EAU, Acua Water Park Fuerteventura.

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