A medio camino entre una noria de acero y una especie de río lento de un parque acuático, se alza la impresionante rueda de Falkirk, una estructura singular que actúa como un ascensor giratorio de barcos. A través de él se conecta el canal de Forth y Clyde con el canal Union en Escocia. Su nombre proviene de su proximidad a la localidad de Falkirk.
Con 35 m de altura, la estructura tiene dos grandes engranajes circulares en cada uno de sus dos extremos que sostienen sendos cajones o esclusas. Con una anchura de 6,5 m, dichas esclusas o cajones contienen hasta 300 m3 de agua. Cuando los brazos de la estructura se elevan, los engranajes que sostienen los cajones en su interior los hacen girar sincronizadamente, lo que permite mantener la horizontalidad de dichos cajones y el nivel del agua en ellos. Gracias a este ingenioso mecanismo, se supera el desnivel de 24 m que existe entre ambos canales.
Para su construcción se utilizaron más de 1.200 t de acero, y hoy en día es la única infraestructura de su tipo en el mundo. La rueda de Falkirk se ha convertido en todo un símbolo nacional, tanto que su imagen aparece en los billetes emitidos por el Banco de Escocia.
Por Alberto López, ingeniero de estructuras sénior en el Dpto. de Arquitectura de Amusement Logic