El barrio de la Baixa Pombalina, en el centro histórico de la capital de Portugal, Lisboa, se reconstruyó después de sufrir el terrible terremoto de 1755. Esta reconstrucción se realizó según un plan urbanístico integral en cuadrícula que dictó el primer marqués de Pombal —del que el barrio toma el nombre—, un tal Sebastião José de Carvalho e Melo, a la postre primer ministro, entre 1750 y 1777, de José I de Portugal. Entre las estrictas exigencias que impuso aquel, además de la cuadrícula de sus calles, se cuenta la de la construcción de edificios con métodos antisísmicos —de la que la Baixa Pombalina es, por cierto, uno de los primeros ejemplos del mundo.

A este respecto, no podemos dejar de nombrar, siquiera de pasada, la invención en aquel momento de la llamada «jaula pombalina», una estructura reticular de madera, integrada en los muros de mampostería, destinada a distribuir las fuerzas que los terremotos ejercen en ellos y hacer a los edificios, de esa forma, más sísmicamente resistentes. Pues bien, y esto es lo que nos interesa, en el corazón de la Baixa Pombalina se alza el hotel de cinco estrellas Art Legacy, un espacio en el que pasado y presente se dan cita, un lugar que se aleja de lo convencional para tributar un homenaje viviente al patrimonio arquitectónico, el arte y la hospitalidad.

Un edificio con alma

La historia del edificio que alberga el Art Legacy Hotel comienza en 1918, cuando la compañía Seguros Sagres lleva a cabo su construcción entre el 175 y el 181 de la Rua do Ouro, donde ubica su sede y sus oficinas. El siguiente registro sobre el destino del edificio indica, ya en los años 60 del siglo XX, que lo adquiere el Grupo Bensaúde —«la mayor empresa privada de las Azores, situada entre las 100 mayores empresas de Portugal [en la actualidad]», con 200 años de historia y actividad en distribución, energía, transporte y logística, turismo y servicios. Y aunque la compañía trasladó su sede a las islas Azores en 1974, las plantas superiores del edificio mantuvieron sus oficinas en el continente, mientras que las plantas bajas acogieron tiendas y comercios diversos.

Desde entonces, hasta el momento del comienzo de las obras de su rehabilitación en 2018, no hay noticias del destino del inmueble. Promovida por AT Group y My Story Hotels, dicha rehabilitación se desarrolló durante más de 4 años, hasta su apertura en diciembre de 2023 como lo que es hoy, el Art Legacy Hotel. El arquitecto Luís Rebelo de Andrade dirigió la meticulosa restauración, de acuerdo con el Plano de Pormenor de Salvaguarda de la Baixa Pombalina —normativa que determina las actuaciones en edificios históricos con el fin de su preservación—, incluida la fachada de estilo Beaux Arts, esencia original del edificio.

Un estilo arquitectónico del pasado reciente

El estilo Beaux Arts, también conocido como academicismo francés​, emana de la Escuela Nacional Superior de Bellas Artes de París (École Nationale Supérieure des Beaux Arts). La arquitectura que se acoge a este estilo se caracteriza por la simetría y la jerarquización de espacios —aquellos nobles con grandes entradas y escalinatas y otros secundarios, más utilitarios—, la profusión de referencias historicistas más o menos explícitas, una tendencia al eclecticismo y el recurso a variados detalles arquitectónicos (balaustradas, pilastras, relieves y esculturas, guirnaldas, cornisas de apoyo, etc).

Si bien la fachada del Art Legacy nos traslada a principios del siglo XX, su interior es en cambio un tributo al diseño vanguardista. «Con una visión única de diseño y estética, el arquitecto Luís Rebelo de Andrade incorporó la esencia de la icónica marca Moooi», leemos en una de las secciones del portal del hotel. Y el resultado se observa en unos espacios en los que «la belleza se funde con la funcionalidad». Las 53 habitaciones, por su parte, envuelven a los huéspedes en una experiencia estética inmersiva, con una combinación de colores vivos y elementos clásicos y «un aire enérgico y de personalidad».

Una llave Michelin

El Art Legacy Lisboa fue galardonado recientemente con la Llave Michelin, una prestigiosa distinción que la guía otorga desde 2024 —en una escala de 1 a 3, igual que las estrellas que concede a los restaurantes— a los hoteles que destacan por su diseño único, el servicio impecable y las experiencias memorables que proporcionan a sus huéspedes. El hotel celebra la llave Michelín como «validación de una identidad única», resultado del fértil diálogo entre arquitectura histórica y diseño vanguardista. Y la guía Michelín lo pone así: «un elegante edificio de oficinas centenario en el centro de Lisboa se ha convertido en el lujoso Art Legacy Hotel Baixa-Chiado, un hotel boutique con sello de diseño». Por otra parte, el establecimiento fue distinguido últimamente con el premio World Luxury Awards 2024.

Fuentes: Art Legacy Hotels, Rebelo de Andrade, Magazine Imobiliário, Publituris Hotelaria, MAD White, Ambitur, Guía Michelín.
Imágenes: Art Legacy Hotels, Rebelo de Andrade.

¿Le ha gustado la noticia? ¡Compártala en sus redes!