Cuando cae una gota sobre una lámina de agua, se produce en determinadas condiciones un efecto de rebote que proyecta una columna del mismo líquido en dirección contraria al de la caída. Esa columna de agua es precisamente la forma general que parece inspirar el diseño y la arquitectura de la torre Cheongdam, obra del estudio de arquitectura con sede en Berlín, Alemania, J.Mayer.H Architekten. El proyecto de diseño y arquitectura de este rascacielos de uso mixto se hizo público al conocerse que había ganado el concurso internacional organizado por las autoridades de Seúl, capital de Corea del Sur.
Según afirman los propios arquitectos, Cheongdam significa «agua clara» en coreano. Como vemos, no es casualidad que el diseño y la arquitectura de la torre recuerde a esa columna de agua. De hecho, el tema del agua es «el punto de partida de su diseño fluido y orgánico, con terrazas verdes y una fachada en oleadas protectoras que envuelven el edificio como las ondas de una gota en la superficie del agua». Por si no fuera suficiente, «el uso sostenible del agua y el ajardinamiento con plantas es una preocupación central en el desarrollo de la torre Cheongdam». El resultado es un «organismo que vive y respira en el paisaje urbano».
Senderos serpenteantes, espacios verdes abiertos, elementos acuáticos, espacios para eventos culturales, «lujosas zonas comerciales», se distribuyen a lo largo del rascacielos y en su pedestal. Una terraza en la azotea, con vistas inmejorables de la ciudad y el río Han, corona el proyecto de J.Mayer.H Architekten. A fe de sus creadores, los espacios públicos que conforman el diseño y la arquitectura de la torre Cheongdam representan «el centro de la escena de la moda y la K-Culture coreanas en Seúl», o, en otras palabras, «un lugar ideal de identificación para el desarrollo y la documentación de la K-Culture».
Es necesario aclarar, a modo de paréntesis final, que la Cultura-K —si traducimos al castellano la fórmula acuñada recientemente—, también conocida como «Ola Coreana» (Korean Wave), o Hallyu en coreano, hace referencia a la cultura popular de Corea del Sur. Esta incluye la música pop (también conocida como K-pop), los dramas televisivos y las películas, pero también la literatura y las artes escénicas que se producen en el país asiático. El término sirve para dar nombre al fenómeno de expansión internacional de dicha cultura después de que el film Parásitos, del director surcoreano Bong Joon-ho, recibiera en 2019, primero la Palma de Oro en el Festival de Cannes (por unanimidad del jurado), y después sendos Óscars a mejor película y mejor película internacional.
Fuente: J.Mayer.H Architekten.
Imágenes: J.Mayer.H Architekten.