En abril de 1984, el Comité Euro-Internacional del Hormigón (CEB por sus siglas en francés) publicaba un boletín monográfico (nº152) sobre un taller internacional del sector de la construcción, organizado conjuntamente con la Unión Internacional de Laboratorios y Expertos en Materiales, Sistemas de Construcción y Obras (o RILEM en francés), celebrado entre el 18 y el 20 de mayo de 1983 en Copenhague, Dinamarca, con el título Durability of Concrete Structures (Durabilidad de las Estructuras de Hormigón). Entre los trabajos difundidos en dicho boletín se encontraba el de un tal W. R. de Sitter —nada más sabemos de él—, bajo la leyenda Costs for service life optimization. The «law of fives», algo así como «Costes de optimización de la vida útil. La “ley de los cincos”».
![La-«ley-de-los-cincos»-de-W.-R.-de-Sitter-01](https://amusementlogic.es/wp-content/uploads/2025/02/La-ley-de-los-cincos-de-W.-R.-de-Sitter-01.jpg)
Aquel trabajo de de Sitter goza de alguna fama entre ingenieros, diseñadores y técnicos del sector de la construcción, si bien se trata de una «ley» meramente aproximativa, de la que de hecho no hay una formulación puramente matemática. Sin embargo, de ella se extraen enseñanzas positivas para organizaciones que, como Amusement Logic, se dedican al sector de la construcción. Por ese motivo, os la traemos aquí y pasamos directamente a explicárosla:
«Una de las principales razones del aumento del interés por la cuestión de la durabilidad del hormigón, es la lamentable frecuencia con que aparecen daños [en él] debido a la corrosión del acero reforzado». El texto del boletín comienza así su exposición, para pasar poco después a establecer las 4 fases que señala de Sitter en el ciclo de vida de cualquier estructura de hormigón. Son las siguientes:
-Fase A: esta primera etapa se inicia con el diseño del proyecto e incluye su construcción y el periodo de fraguado. De Sitter asegura que, para conseguir «cierto grado deseado de durabilidad» respecto del ciclo de vida de una estructura, deben tomarse ciertas medidas en esta fase. Y las resume bajo la idea de «buenas prácticas de ingeniería». Se trata de producir un diseño adecuado en lo tocante al espaciado del armado y otros aspectos técnicos del hormigón; una construcción adecuada en lo que se refiere a la mezcla de hormigón, al compactado, a la mano de obra, etc.; el cuidado en el fraguado; el empleo de revestimientos protectores; y, por último, la realización de un control de calidad.
![La-«ley-de-los-cincos»-de-W.-R.-de-Sitter-02](https://amusementlogic.es/wp-content/uploads/2025/02/La-ley-de-los-cincos-de-W.-R.-de-Sitter-02.jpg)
-Fase B: esta se refiere al periodo inicial de mantenimiento, una vez la estructura de hormigón se encuentra en uso. Para prolongar su ciclo de vida, y puesto que probablemente «se ha producido cierta carbonatación (…) y agentes agresivos han penetrado el revestimiento», deberemos realizar una limpieza, recubrirlo y/o impregnarlo, y aumentar localmente el revestimiento mediante gunitado.
![La-«ley-de-los-cincos»-de-W.-R.-de-Sitter-03](https://amusementlogic.es/wp-content/uploads/2025/02/La-ley-de-los-cincos-de-W.-R.-de-Sitter-03.jpg)
-Fase C: en esta etapa de mantenimiento y reparación los daños han alcanzado el armado de acero, el cual ha empezado a corroerse. Es el momento de retirar el hormigón en mal estado, realizar un nuevo gunitado o volver a revestir el material.
-Fase D: es la última fase en la vida de un edificio o estructura, cuando el armado se ha corroído en «grandes áreas», cuando «la cubierta se ha desconchado en muchos sitios» y «el agrietamiento se produce a gran escala». En este momento, solo salvaremos la estructura con medidas de calado: renovación y sustitución casi total del revestimiento, y demolición, retirada y reconstrucción de algunas de sus partes.
![La-«ley-de-los-cincos»-de-W.-R.-de-Sitter-04](https://amusementlogic.es/wp-content/uploads/2025/02/La-ley-de-los-cincos-de-W.-R.-de-Sitter-04.jpg)
![La-«ley-de-los-cincos»-de-W.-R.-de-Sitter-07](https://amusementlogic.es/wp-content/uploads/2025/02/La-ley-de-los-cincos-de-W.-R.-de-Sitter-07.jpg)
Pues bien, acto seguido, el boletín del CEB pasa a formular la teoría que de Sitter ha presentado «sin contemplaciones», respecto al tema a que hace referencia el título de la ponencia, es decir, las proporciones del coste de optimización de la vida útil de un edificio o estructura. Dice así:
«1 dólar gastado en la fase A equivale a 5 dólares en la fase B, equivale a 25 dólares en la fase C, equivale a 125 dólares en la fase D».
![La-«ley-de-los-cincos»-de-W.-R.-de-Sitter-06](https://amusementlogic.es/wp-content/uploads/2025/02/La-ley-de-los-cincos-de-W.-R.-de-Sitter-06.jpg)
Aunque, como decíamos, se trata de una ley aproximativa y, por tanto, las cifras en dólares no pretenden exactitud, sin embargo, la ley de los cincos muestra de forma gráfica e ilustrativa que los fondos empleados en las fases A y B de la vida útil de un edificio o estructura ahorrarán recursos en las fases posteriores, que de otra forma aumentarían según progresión geométrica con factor estimado de 5. Y esto ocurrirá en la medida en que esos recursos invertidos en las fases A y B hagan que las fases C y D lleguen mucho más tarde en la vida de la estructura. O, dicho de otra forma, que para ahorrar en el mantenimiento y conservación de construcciones de hormigón, «los ingenieros que trabajan en instituciones científicas, los consultores en ingeniería y los contratistas acepten el reto y se concentren en las fases A y B».
Fuentes: Google Books, FIB.