El mayor crecimiento urbano del planeta

De las regiones en vías de desarrollo, África es la que ha experimentado el mayor crecimiento urbano en el mundo, a razón de un 3,5% anual durante las dos últimas décadas. Y las proyecciones indican que seguirá así hasta 2050. Este crecimiento urbano se debe principalmente a la migración del campo a la ciudad y a las altas tasas de crecimiento natural de la población en las ciudades. A este respecto, solo cabe añadir que el desarrollo urbano no es uniforme en todo el territorio africano. El norte tiene una mayor proporción de población urbana, con el 47,8%, respecto del África subsahariana, con un 32,8%.

Sin embargo, este desarrollo urbanístico no ha sido todo lo integrador que cabe desear, sino que ha provocado la proliferación de barrios marginales, pobreza urbana y el aumento de las desigualdades (según el African Development Bank Group, la desigualdad en las ciudades africanas es la segunda más alta del mundo). Los planes urbanísticos son precisamente una de las herramientas para hacer de las ciudades unas comunidades más inclusivas, seguras y sostenibles. Y para que los planes sean eficaces en este sentido, los expertos en urbanismo sostienen desde hace décadas que hay que alejarse de la forma tradicional de hacerlos.

Breve historia de los planes urbanísticos en África

Los planes urbanísticos de época colonial, responsables en parte de la situación actual en África, respondieron a menudo a un planteamiento descendente, desde arriba para los de abajo, y a «visiones modernistas de futuros urbanos utópicos». Con el final del colonialismo, sin embargo, se elaboraron diversos planes maestros para ciudades existentes o nuevas, con la participación de numerosos técnicos y actores internacionales.

Posteriormente, en la década de los 80, imperaron los programas de ajuste estructural del Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional, lo que redujo la actividad urbanística planificadora en todo el continente. Y luego, en los 90, las agencias internacionales de desarrollo, como ONU-Hábitat, introdujeron una planificación urbanística más estratégica y participativa.

Por fin, durante las dos primeras décadas de nuestro siglo, ha resurgido con fuerza la planificación general en África. Los planes urbanísticos, llevados a cabo principalmente por grandes empresas de arquitectura y diseño internacionales, consistieron en el dibujo de las ciudades sobre «lienzos en blanco». Y estas nuevas ciudades reflejan a menudo las ambiciones de políticos individuales, una clase media en expansión con nuevas exigencias por su estilo de vida, o un mayor interés de los inversores extranjeros en el África urbana. Mucho más compleja es la planificación general de las ciudades existentes, donde no hay un lienzo en blanco, sino un heterogéneo conjunto de actores e intereses locales e internacionales.

Actores nacionales e internacionales en la planificación urbanística africana

La Agencia Japonesa de Cooperación Internacional es un actor importante, con planes maestros para ciudades desde Lilongwe hasta El Cairo. Surbana Jurong, de Singapur, es otro actor. Ha conseguido contratos o preparado planes maestros urbanos para la capital ruandesa, Kigali, y la burundesa, Bujumbura, entre otras. Los actores chinos no participan directamente, pero tienen un poderoso efecto ejemplificador gracias a sus ciudades planificadas. Y las grandes empresas con sede en Londres, Nueva York, Tokio, Beirut, Dubai, El Cairo y Johannesburgo también participan en la elaboración de planes urbanos maestros.

Los intereses internacionales en la planificación general pueden ser tanto geopolíticos como económicos. Por ejemplo, pueden perseguirse con la esperanza de que, al preparar un plan urbano para una ciudad africana, surjan oportunidades de inversión en infraestructuras. Los actores nacionales y locales tienen intereses diferentes, aunque a veces hay sinergias con los actores internacionales. En este sentido, apoyan la planificación general con la esperanza, por ejemplo, de conseguir inversiones extranjeras, mediar en conflictos locales difíciles, gestionar el crecimiento o definir el orden urbano.

Hacia un urbanismo más participativo y local

A pesar del papel activo de los actores internacionales, los ejemplos de Accra, El Cairo y Kigali señalan la aparición y el aumento de la planificación de actores africanos comprometidos en procesos cívicos locales. Así, los planteamientos descendentes dejan paso a propuestas estratégicas más específicas, flexibles y participativas a la hora de definir los planes urbanísticos. Con ellas, la planificación urbana responde más directamente a las necesidades y realidades locales.