Estamos trabajando en el diseño arquitectónico de un nuevo intercambiador de transporte o HUB, una puerta de entrada a la red de transporte subterráneo de la ciudad que muestra, como un iceberg, una pequeña parte de todo su volumen.
El intercambiador funciona como una estructura contemporánea y funcional dentro del espacio urbano e incorpora los más avanzados criterios de accesibilidad, movilidad de flujos y ergonomía. Nace como una propuesta a las necesidades de desarrollo y estructura urbana desde una percepción moderna del espacio urbano. Forma y función se fusionan en este diseño con un perfecto equilibrio para representar un elemento icónico en el entramado urbano.
El planteamiento espacial de la estación se basa en los flujos de circulación y la ubicación de las áreas operacionales, metro y autobús. El diseño del edificio está compuesto por un núcleo central de circulación con ascensores y escaleras mecánicas, y por una cubierta con un diseño orgánico con altura variable, de siete a cuatro metros. El edificio permite proteger la circulación de transeúntes del sol y la lluvia en todo momento. Además, las formas orgánicas de su diseño evitan los ángulos y las zonas oscuras, facilitando así una amplia visibilidad.
Sobre cota cero, el conjunto arquitectónico proyecta una gran estructura volada que recoge la terminal de autobuses de la ciudad, sirviendo no solo líneas locales sino también líneas de cercanías que nos llevan fuera de la ciudad.