Los niveles de auditoría para Modelos BIM (siglas en inglés para Modelado de Información para la Construcción), son un total de 7 y se trata de los siguientes:

1. Cumplimiento del Plan de Ejecución BIM (PEB).

2. Revisión de «Hard Clash», o interferencias espaciales entre disciplinas.

3. Revisión de «Soft Clash», o interferencias menos evidentes (por ejemplo, los espacios para abrir escotillas, la accesibilidad a dispositivos, válvulas y equipos, espacio para el paso de maquinaria, etc.).

4. Cumplimiento del MEI (Manual de Entrega de Información, o IDS por Information Delivery Specification), que publicó el organismo BuildingSMART. Son 16 especificaciones para la construcción de edificios y otras 10 para la de infraestructuras.

5. Salud del Modelo, que abarca, entre otros aspectos, un modelo «limpio», del que se eliminan elementos y vistas en desuso, desconexiones y otros componentes que puedan afectar al rendimiento del trabajo con el archivo.

6. Integridad del Modelo, que asegura la calidad y coherencia de la información proporcionada, gracias a su actualización constante y consistente con el resto de información relacionada (planos, tablas y cubicaciones, análisis de programas informáticos, etc.).

7. Revisión del Diseño, tanto a nivel disciplinario como en conjunto. Esta revisión tiene en cuenta normativas aplicables, especificaciones del cliente, condiciones existentes, operativas, precisión geométrica, diseño de planos, etc.

Por Ángel Ibáñez Pérez, ingeniero MEP sénior en el Dpto. de Arquitectura de Amusement Logic