Estudió Veterinaria y un Máster en Administración de Empresas y empezó por azar a trabajar en la gestión de restaurantes. La operación y puesta en marcha de restaurantes lo llevó a ocuparse de las operaciones alimentarias de los Juegos Olímpicos de Invierno de Sochi. Y por fin, a las Islas Canarias, donde fue responsable de un parque acuático por primera vez. A partir de ese momento, no dejó la operación y dirección de parques acuáticos, entre ellos el Ramayana Water Park en Tailandia y el Garden City en Camboya. Y por ese camino llegó a la dirección general del nuevo parque acuático de Bangladesh, el Mana Bay Water Park, cargo que desempeña en la actualidad.

Amusement Logic: Tras licenciarse en Veterinaria, comenzó su carrera como director general de restaurantes de empresas como Melatex y River Group. ¿Qué le llevó de la Veterinaria a la restauración?

Lev Budin: Durante mis estudios, aprendí cómo funciona el cuerpo humano y el de los animales; fisiología, anatomía, bioquímica y biofísica de los procesos internos. A lo largo de todas las etapas posteriores de mi vida, estos conocimientos me fueron muy útiles. Siendo aún estudiante, pasé la selección y me inscribieron en el equipo del primer restaurante McDonald’s de Moscú, allá por 1989. La competencia por una plaza en este restaurante era muy grande en aquella época… Había que contratar a 500 empleados, pero se presentaron más de 50.000… En aquel momento, cuando entré a trabajar en el primer restaurante ruso-canadiense, me di cuenta de que mi destino estaba en el sector servicios… y así empezó mi carrera. Después de McDonald’s vino el Pizza Hut, y después el trabajo en el primer hotel de cinco estrellas de Moscú, el Penta-Renaissance, en el emblemático Sports Bar de la calle Arbat. Fueron los 10 primeros años de mi carrera. Tras recibir una invitación para trabajar en la moderna empresa de restauración Melatex (líder en el sector), me encargaron la apertura y posterior gestión de una cafetería gastronómica en el centro de Moscú. Todo fue bien y pronto tuve la oportunidad de gestionar varios restaurantes, abrir otros nuevos y desarrollar la empresa.

Al mismo tiempo, ingresé en la Academia de Economía y unos años más tarde obtuve un segundo máster, y luego otro, un MBA (siglas en inglés para Máster en Administración de Empresas) centrado en el marketing. En total, tengo a mis espaldas la apertura desde cero de más de 10 proyectos de restaurantes en Rusia y los países de la CEI (siglas en inglés para Comunidad de Estados Independientes), y estuve a cargo de las operaciones alimentarias durante los Juegos Olímpicos de Invierno en Sochi.

A.L.: Posteriormente, pasó a ser director general de Lagarto Limited, un complejo de ocio con parque acuático y restaurante en Santa Cruz de Tenerife, Islas Canarias, España. ¿Cómo se produjo este cambio?

L.B.: Tras recibir inesperadamente una oferta de trabajo en España, acepté sin dudarlo. Así empezó mi vida laboral en el extranjero. Tuve que aprender la lengua española y sumergirme en la cultura y las tradiciones de España. Mis conocimientos de trabajos anteriores y el título de MBA me ayudaron a superar las dificultades de comunicación. Por aquel entonces, ya había visitado 80 países del mundo y esto supuso una ventaja adicional para la ejecución de los proyectos previstos en Tenerife. Durante los tres años de mi vida en España, conseguí abrir un restaurante gastronómico de gran éxito, un club, construir varias propiedades inmobiliarias y optimizar el funcionamiento de un parque acuático. Por un lado, parecería que no son negocios muy relacionados, pero por otro, están todos en el contexto del sector servicios y la hostelería. Por eso, con conocimiento y respeto por las tradiciones del país, con un corazón abierto y sentimientos sinceros, todo ello fue posible y cobró vida.

A.L.: Desde entonces, nunca dejó el sector de los parques acuáticos. De Lagarto pasó al Parque Acuático Ramayana, el mayor de Tailandia, donde trabajó como jefe de operaciones. ¿Por qué se trasladó a este país y en qué consistía su trabajo?

L.B.: Al vivir en España y dedicarme en parte a la industria del ocio acuático, empecé a interesarme por ella. Comprendí claramente que un parque acuático moderno no es sólo toboganes, sino todo un complejo de mecanismos, edificios, estructuras, diversos departamentos y comunicaciones. En este sector, la restauración y el sector servicios, la hostelería y las ventas, el marketing y la publicidad se han unido con éxito en un todo único.

La vida en España, en Tenerife, en algún momento me saturó. Tenerife es una isla y en ella se perciben claramente los límites. Y en ese momento se estaba construyendo en Tailandia el parque acuático más grande y moderno de Chonburi. Mis amigos, relacionados con la empresa que participaba en su construcción, me recomendaron que intentara ponerme en contacto con la dirección del futuro parque. Todo salió bien y durante los años siguientes participé en la explotación y el desarrollo de ese maravilloso parque. Trasladarme a Tailandia no me resultó difícil. Asia… cuando entras en contacto con ella por primera vez, te enamoras incondicionalmente de esa parte de la tierra.

Llegué al parque acuático Ramayana en el momento en que el parque se abría en modo de pruebas. Mi control directo incluía la gestión operativa del parque acuático, el análisis de la situación actual y la optimización de costes. En un periodo de tiempo bastante corto, conseguí establecer un sistema de gestión ininterrumpido e inteligente, implantar la norma ISO 9001, reducir significativamente los costes operativos y crear un equipo de ventas y marketing dinámico y creativo. A partir de los resultados del segundo año de funcionamiento, Ramayana fue nombrado el mejor parque de Tailandia, el número 2 de Asia y el 10º del mundo por TripAdvisor.

A.L.: ¿Qué tipo de parque acuático es Ramayana y a qué público va dirigido?

L.B.: Es el mayor parque acuático de Tailandia. Tiene una superficie de 170.000 m2, 26 toboganes acuáticos y una capacidad de hasta 7.000 visitantes. Su idea e inspiración procede de la famosa epopeya heroica Ramayana, una historia llena de misterio, aventura, magia y amor, que se ha trasladado a la arquitectura y el diseño para todos los visitantes del mundo. A lo largo de 7 años de funcionamiento, el parque acuático Ramayana ha mantenido firmemente su liderazgo no sólo en Tailandia, sino en toda Asia. El parque, abierto todo el año, atiende a lugareños y turistas, y tiene una amplia variedad de ofertas especiales promocionales, familiares y corporativas.

A.L.: ¿Qué particularidades encontró en Ramayana con respecto al funcionamiento? ¿El funcionamiento de los parques acuáticos es el mismo en todos los rincones del mundo?

L.B.: La lista de particularidades del Ramayana incluye: 1) un sistema de motivación (con incentivos) para los empleados de la empresa de todas las categorías y niveles; 2) un sistema de remuneración flexible, con un número significativo de empleados contratados por horas en trabajos a tiempo parcial; 3) amplia segmentación de precios y ofertas en varios sectores del mercado: guarderías, escuelas de primaria, escuelas de secundaria, colegios, universidades, agencias de viajes segregadas por geografía y operadores turísticos; 4) Se ha puesto en práctica un sistema de incentivos para trabajadores independientes, con cientos de ellos registrados que trabajan para generar ingresos. El parque tiene un día libre los miércoles y los toboganes acuáticos tienen horarios de funcionamiento individuales.

A.L.: Usted dio el salto al parque acuático Garden City, el mayor de Camboya, para trabajar como director general. Y éste, ¿cómo lo describiría y cuál es su público?

L.B.: El trabajo en Camboya empezó cuando el parque estaba recién construido. Mis responsabilidades inmediatas incluían la coordinación de la construcción en las fases finales, la puesta en funcionamiento de las atracciones acuáticas y los toboganes, la contratación de personal, la puesta en práctica de las normas internacionales de calidad y seguridad, y la planificación y realización de eventos publicitarios y de marketing en colaboración con el Garden City Hotel, de cinco estrellas.

El parque acuático Garden City es una de las mayores atracciones internacionales de Camboya. Dispone de 36 toboganes acuáticos, de la primera playa artificial al aire libre de Camboya, el único río lento extremo del país, 60 cabañas, sistema de pago CASHLESS y tiene capacidad para 7.000 visitantes.

Más del 90% de los visitantes del parque son locales. Se trata sobre todo de jóvenes de entre 18 y 25 años. Una parte importante de los ingresos procede también de las ventas por la celebración de eventos corporativos. Y la estrategia de marketing se centra en crear condiciones atractivas para organizar grandes eventos, festivales de música y alternar entre atracciones acuáticas y terrestres.

A.L.: Sun Ace Entertainment es un parque acuático y complejo de ocio, anexo al centro comercial AEON, el mayor de Camboya. ¿Existen sinergias entre el centro comercial y el parque acuático? ¿Cuáles?

L.B.: Tener un parque acuático y un centro comercial juntos es una decisión muy inteligente y con visión de futuro. En este proyecto se han aplicado muchas ideas, como eventos nocturnos en el parque acuático; los clientes, cansados tras las compras, descansaban y se relajaban en el parque; hay un club de día infantil donde los padres dejan a sus hijos, mientras compran despreocupadamente en el centro comercial. Y aprovechando la capacidad escénica del parque acuático, también se organizaron eventos musicales, teatrales y de danza. Así, se produce un efecto sinérgico cuando el parque acuático y el centro comercial se desarrollan y promocionan mutuamente. Con un tráfico medio diario de 10.000 personas, este proyecto ha demostrado su fiabilidad y sus perspectivas de futuro.

A.L.: Después de más de un año, por fin llegó al puesto que ocupa hoy, el de director general del recién inaugurado parque acuático Mana Bay Water Park, en Bangladesh. ¿Qué destacaría de este parque?

L.B.: Es el parque acuático más grande y moderno de Bangladesh, con capacidad para 8.000 visitantes al mismo tiempo. Cuenta con el único volcán artificial «activo» del mundo, con una altura de 25 metros y una base de 45 metros, diseñado específicamente para Mana Bay Water Park. Todos los días, tras la puesta de sol, los visitantes del parque tienen la oportunidad única de contemplar su erupción. Cuenta además con las olas artificiales más altas del sur de Asia, con 17 toboganes únicos, con el único simulador de surf doble del país, con el Kidz Kraze, la mayor atracción familiar de Bangladesh, con el único servicio de comida y bebida del país que se organiza individualmente para cada una de las 18 cabañas de madera, con el inolvidable paisaje interior en el estilo arquitectónico tradicional polinesio adaptado a las necesidades modernas… Todo en un terreno de 51.700 m2, con piscinas, cascadas y jardines, cuevas, restaurantes y bares, un complejo de spa, un río lento de más de 700 m de longitud con géiseres, fuentes, olas artificiales e iluminación nocturna, tiendas de ropa de marca y de recuerdos.

En el parque se encuentra además el único centro educativo del país que ofrece diversos programas de formación en técnicas de rescate en catástrofes naturales, clases de natación, arte moderno, normas internacionales de servicio y hospitalidad, formación de socorristas, escuela de cocina.

Mana Bay Water Park es el único parque acuático del país en el que el funcionamiento se lleva a cabo de acuerdo con el estándar internacional de calidad. El equipo de gestión del parque incluye empleados de Tailandia, Indonesia, Brasil, Singapur, Rusia, Pakistán y Egipto. Un equipo unido y bien coordinado que ha demostrado su eficacia y profesionalidad en varios meses de trabajo tras la inauguración.

A.L.: ¿Qué acogida ha tenido este parque en el país? ¿Qué público atrae en estos momentos?

L.B.: El nuevo parque acuático Mana Bay Water Park provocó una gran oleada de emociones positivas y sigue recogiendo merecidos respaldos. Durante el poco tiempo transcurrido desde su inauguración, se celebraron en las instalaciones del parque acuático varios acontecimientos significativos para el país: el concurso Miss Mundo Bangladesh, un festival internacional de danza y un espectáculo de luz y música.

Es un hecho que en un país con una población de unos 200 millones de habitantes existe una gran diferencia de ingresos. El grupo más numeroso de visitantes del parque es el de clase media y media alta, y miles de ellos celebraron en él sus vacaciones de empresa. Gracias a las normas internacionales de servicio y seguridad aplicadas en la práctica, Mana Bay Water Park ha llevado el sector de la hostelería y el ocio de Bangladesh a un nuevo nivel.

A.L.: ¿Qué papel desempeña la noche en el funcionamiento del Parque Acuático Mana Bay Water Park?

L.B.: Tradicionalmente, la hora posterior a la puesta de sol es muy popular en Bangladesh. Muchos actos públicos y festivales terminan mucho después de medianoche. Debido a estas características, el diseño y las infraestructuras del parque Mana Bay Water Park se planificaron de antemano para su funcionamiento nocturno. Durante las fiestas nacionales y los fines de semana largos, el parque permanece abierto hasta bien entrada la noche, de acuerdo con las normas internacionales de seguridad.

Por la noche, Mana Bay tiene un aspecto especialmente atractivo, con iluminación individual para cada piscina y cada tobogán acuático. A esto se añade una atracción nocturna única: el espectáculo Volcano, con efectos de sonido, fuego y luz.

A.L.: ¿Cómo prevé el futuro de este gran parque acuático?

L.B.: En el futuro, será importante desarrollar entretenimiento adicional en el parque, no siempre relacionado con atracciones acuáticas. Por ejemplo, crear una zona de juegos multifuncional para la creación de equipos y actividades diversas; y añadir cuerdas y dispositivos de flotación a las piscinas existentes con el fin de hacerlas más divertidas, más atractivas para la aventura acuática; y poner en marcha la idea de un espectáculo de música ligera; y un mercado creativo de fin de semana. Quizás sería pertinente desarrollar aún más la tematización polinesia del parque utilizando innovaciones tecnológicas de inmersión. Hay propuestas y opciones para la construcción de un complejo natural, un hotel cercano, un parque de atracciones extremo y un cine con muchos efectos.