Las estructuras en construcciones y edificios experimentan movimientos y dilataciones o contracciones en sus materiales debido a diversos factores, entre ellos terremotos o variaciones de temperatura. Estos movimientos continuos pueden derivar en la aparición de fisuras y/o grietas, especialmente en zonas críticas como esquinas o uniones. Pero, ¿cuál es la diferencia entre una fisura y una grieta?

Aunque suelen usarse de manera indistinta, ambos términos tienen significados técnicos diferentes, a saber:

-Fisuras: Son aberturas estrechas que afectan únicamente el acabado superficial de las estructuras y edificios. Suelen ser microscópicas, especialmente en hormigones, y, en cualquier caso, no comprometen la solidez del soporte estructural.

-Grietas: Son aberturas que atraviesan la capa portante de la estructura o edificio, como muros, paredes o fachadas, y que, por tanto, afectan a su estabilidad y funcionalidad.

Las grietas, que suponen daños más importantes en edificios, construcciones y estructuras, se clasifican en tres categorías principales:

-Grietas verticales: estas grietas suelen originarse por asentamientos menores o contracciones normales. No obstante, si alcanzan un ancho de 3 mm o más, podrían indicar un problema grave de asentamiento que requiere una inspección especializada. Y si la grieta es más ancha en la parte superior, esto podría indicar hundimiento en un lado de los cimientos o elevación del centro. En cambio, si es más ancha en la parte inferior, probablemente se trate del hundimiento del lado opuesto o del centro.

-Grietas horizontales: las grietas horizontales representan un problema significativo, ya que suelen indicar que la pared está perdiendo capacidad estructural. Un mal asentamiento de los cimientos, daños por humedad o por tuberías obstruidas, o una nivelación inadecuada del suelo combinada con un drenaje deficiente —lo que saturaría las paredes con agua y aumentaría la presión hidrostática—, se encuentran entre las causas más comunes.

-Grietas en zigzag: estas grietas son más frecuentes en paredes de ladrillo que en las de hormigón. Siguen el patrón de las juntas de mortero, lo que indica un defecto estructural comúnmente asociado a un asentamiento irregular. Si el ancho de la separación en el mortero supera los 13 mm, el problema debe ser atendido de inmediato por un especialista en estructuras, ya que puede comprometer seriamente la estabilidad del edificio o de la estructura.

No obstante lo dicho, cada caso particular de aparición de grietas debe ser evaluado por un especialista en ingeniería estructural para determinar el alcance y las soluciones adecuadas.

Por Jean Carlos Soto, ingeniero estructural sénior en el Dpto. de Arquitectura de Amusement Logic

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