Los centros comerciales pueden ser mucho más que, simplemente, espacios de compra. El concepto que propone Amusement Logic a través de su Departamento de Diseño es el de un centro comercial como entorno especial en el que la arquitectura entroniza a la naturaleza. La experiencia de compra se transforma así en un paseo sensorial y refrescante. Con él, la idea tradicional de centro comercial desaparece en favor de la de un oasis.
Escondido entre formaciones geológicas que parecen esculpidas por el tiempo, el espacio se abre como un refugio natural donde luz y agua tienen un papel protagonista. Las formas orgánicas de las fachadas, que evocan acantilados de creta, proporcionan esa calma que solo emana de la serenidad de la naturaleza, e invitan así a que los visitantes desconecten del bullicio urbano y se concentren en las compras. Palmeras y plantas de especies cuidadosamente elegidas, refuerzan la atmósfera de bienestar y relajación. Mientras tanto, el agua espejea con dinamismo en los estanques.


Texturas suaves, colores neutros, estanques, vegetación, pero también la distribución de espacios, todo favorece el flujo cómodo de los transeúntes por un recorrido tan agradable como memorable. Al fin y al cabo, la arquitectura comercial del futuro también debería comunicar con el lenguaje del medio ambiente y significar con él una sana sostenibilidad. Tanto los visitantes como las marcas que apelan a ellos, encuentran en estos espacios un aire de exclusividad y belleza, un clima ideal para las compras.