Los parques acuáticos tienen unas exigencias muy claras en lo que se refiere a las especificaciones de sus pavimentos exteriores:

-Deben ser económicos debido a las grandes superficies a cubrir.

-Deben contar con una resistencia suficiente para el paso de vehículos de mantenimiento.

-Al ser superficies de tránsito de público sin calzado o con calzados abiertos, deben ser higiénicos, baldeables con agua a presión.

-Por la misma razón, deben ser antideslizantes, pero a la vez no molestos para los pies.

-Deben tener un alto índice de reflexión solar, para no quemar los pies, pero sin llegar a ser reflectantes o deslumbrantes.

-Tienen que ser resistentes a los químicos presentes en aguas de piscinas.

-Deben facilitar la evacuación de aguas (con pendientes, sumideros, etc.).

-Por último, deben contar con la posibilidad de realizarse con formas complejas, cambios de color, etc.

De acuerdo con estos requisitos, los acabados más clásicos, por orden creciente de precio, son:

Cemento cepillado

Es el más sencillo y económico. No se suele usar por su apariencia básica. Es además un poco menos duradero que los demás al no contar con un acabado endurecedor y por el raspado de su superficie.

Adoquinado

Resulta económico y duradero, y presenta un aspecto clásico. Ofrece muchas posibilidades para el diseño y permite las reparaciones. Para su correcta instalación en parques acuáticos, es necesario confinarlo con un encintado perimetral. Puede usarse para marcar recorridos generales por donde pueden transitar vehículos. Por lo demás, es menos recomendable en zonas húmedas y junto a piscinas.

Cemento con agregado expuesto

Es necesario controlar la granulometría y la forma del árido expuesto. Resulta ligeramente más económico que el siguiente, el hormigón impreso.

Hormigón impreso

Es un pavimento que se adapta fácilmente a las formas y pendientes de los parques acuáticos. Existe una gama de colores algo limitada. Se trata de un material disponible localmente. Sin embargo, requiere una ejecución experimentada. Por último, permite la tematización gracias a los numerosos tipos de texturas disponibles (madera, arena, empedrados, etc.).

Cerámica

El inconveniente de este pavimento es que suele quebrarse por imperfección en la base o por paso de vehículos. También es difícil encontrar modelos antideslizantes adecuados. Todo ello lo hace más recomendable para el interior, en los edificios de los distintos servicios de los parques acuáticos.

WPC (Wood Plastic Composite)

Con un precio más elevado, este pavimento suele emplearse solo en terrazas por su poco peso, y porque permite el filtrado de aguas hacia pendientes creadas por debajo. A menudo es un pavimento que debe importarse para su instalación en un parque acuático.

Por Miquel Solís, arquitecto sénior en el Dpto. de Arquitectura de Amusement Logic