Actualmente, la impresión ya no se limita a la plasmación en 2D, sobre papel, de palabras o diseños. La llegada de la impresión 3D, en cambio, ha revolucionado la fabricación industrial por completo. Esta tecnología se aplica en multitud de procesos y permite la fabricación rápida de todo tipo de productos, desde un simple llavero hasta la construcción de una casa entera. Con la impresión en 3D, el diseño arquitectónico se abre también a una infinidad de posibilidades nuevas.

Efectivamente, la industria de la construcción no es ajena a esta innovación, sino que la ha adoptado en multitud de proyectos de arquitectura. Así, para la construcción de viviendas se utilizan impresoras 3D de grandes dimensiones, cuya materia prima consiste en un hormigón especialmente elaborado. Su construcción se realiza de forma progresiva, por capas, lo que permite dejar las instalaciones eléctricas y sanitarias embebidas durante el proceso.

En Amusement Logic consideramos que la impresión 3D representa una interesante alternativa de prefabricación. Por una parte, resuelve algunos de los problemas típicos de la construcción de viviendas (costes elevados, extensos plazos de obra). Por otra parte, el proceso es más sostenible y ecológico, una cuestión de vital importancia en la actualidad.

Por Hernán Spaccesi, arquitecto sénior en el Dpto. de Arquitectura de Amusement Logic