El poder de las formas como herramienta educativa: ese es el pretexto que define la nueva idea del Departamento de Diseño de Amusement Logic. Son cápsulas geométricas que se abren en microespacios para que los más pequeños se concentren, descansen o compartan momentos. Se trata de un diseño al servicio de la curiosidad y el juego. Superficies facetadas, contrastes de color y proporciones ergonómicas transforman la arquitectura en un juego de aprendizaje.
No se trata únicamente de un asiento, sino de una pequeña cueva, un refugio o un escenario donde la imaginación sucede. La elección del rojo —enérgico y vital— combina con la neutralidad del blanco —etéreo, casi invisible—, en un equilibrio a cuyos extremos gravitan la emoción y la calma. El ambiente se hace así acogedor y dinámico a un tiempo.
Esta propuesta demuestra la intención del diseño de poner en la balanza pedagogía y emoción. Así, se produce un entorno contemporáneo de alta creatividad —y, sin embargo, de bajo coste—, para escuelas, museos o centros públicos donde el espacio es un actor más del proceso educativo.
Por José María Reyes, diseñador en el Dpto. de Diseño de Amusement Logic



