Los flotadores, sean dobles o individuales, tanto en el descenso de toboganes como para relajarse sobre ellos en la suave corriente de un Río Lento, son un elemento muy popular en los parques acuáticos.

Durante las primeras fases de diseño de un parque acuático, y desde el punto de vista de su operación primero, es necesario considerar la ubicación estratégica de los flotadores, el acceso a ellos y la posibilidad de colas, así como el dimensionado de las zonas de acopio. Pero además, debemos abordar dicho diseño también desde el punto de vista del almacenamiento nocturno o fuera de temporada de esos flotadores.

A la hora de realizar su diseño arquitectónico, podemos aplicar diferentes acabados y cualquier tematización, para integrarlo en la historia concreta que cuenta el parque acuático.

Por Pablo Vidal, arquitecto sénior en el Dpto. de Arquitectura de Amusement Logic