El periodista e historiador de Arte ruso Yuri Bychkov realizó en 1967 una serie de viajes por antiguas ciudades del noreste de Moscú, cuyas impresiones publicó a finales de ese mismo año, en el diario La cultura soviética, bajo el título «Anillo de Oro». A partir de ese momento la expresión se popularizó y hoy se utiliza para referirse a una ruta turística muy popular, entre los ríos Volga y Kliazma, que incluye tradicionalmente ocho ciudades históricas rusas. En ellas se conserva un asombroso número de monumentos religiosos, históricos y culturales que datan de entre los siglos XII y XVII. Se trata de una región de tierras fértiles, con una posición privilegiada en el eje de las rutas fluviales, que contribuyó en gran medida al desarrollo económico de Rusia desde la Edad Media.
Aunque no hay una lista oficial de las ciudades del Anillo de Oro, las siguientes son las ocho ciudades que suelen incluirse en la ruta:
–Sérguiev Posad: aunque esta ciudad se fundó en el siglo XVII, su larga historia puede trazarse hasta el XIV. El Monasterio de la Trinidad y San Sergio, de obligatoria visita, centro de culto de la iglesia ortodoxa rusa, fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1993.
–Pereslavl Zaleski: fundada en 1152, esta pequeña ciudad cuenta con numerosos monasterios e iglesias, y destaca la catedral de la Transfiguración del Salvador, que en la actualidad es un museo.
–Rostov Veliki: una de las ciudades más antiguas de Rusia, de la que se tiene noticia desde el 862. En ella se encuentra un hermoso kremlin apenas transformado por el paso de los siglos.
–Yaroslavl: se fundó a orillas del río Volga a principios del siglo XI. Ciudad de 600 mil habitantes, su patrimonio se compone de numerosos monumentos e iglesias.
–Ivanovo: ciudad de la que se tienen noticias desde 1608. Fue un centro textil importante en época soviética, con una tasa de mujeres mayor que de hombres, por lo que suele referirse a ella como «la ciudad de las novias».
–Súzdal: su existencia se remonta al 1024. Es una pequeña ciudad de 10 mil habitantes, que combina un encanto rural con numerosos monumentos medievales, algunos declarados Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, así como con varios monasterios y con museos en su Kremlin.
–Vladímir: fundada en 1108. Una de las ciudades más bonitas de Rusia, son de visita obligada su catedral medieval de la Dormición de la Madre de Dios y la antigua puerta, además de otros monasterios e iglesias.
El Anillo de Oro es sin duda una de las joyas turísticas de Rusia, recomendable para conocer su aspecto más rural, diferente de las grandes ciudades del país. Si os animáis a visitarla, necesitaréis alrededor de una semana para disfrutar de sus encantos y su historia. Buen viaje.
Por cierto, para una primera impresión, no os perdáis este espectacular vídeo: